La depresión en los gatos
La depresión en las mascotas, sobretodo en los gatos, es un tema poco conocido para la mayor parte de la población.
Sin embargo, la triste realidad realidad es que ésta es responsable de muchos de los "inexplicables" desórdenes de la conducta que a veces observamos en nuestras mascotas y, en consecuencia, es un tema que no debe ser ignorado o desatendido.
Por ello les presentamos parte de un artículo electrónico pubicado originalmente en The PetFirst Pet Insurance Blog bajo el titulo: “Depression and pets: What You Need to Know”.
Muchos veterinarios y expertos están de acuerdo en que los animales también pueden sufrir de depresión, aunque no exista evidencia científica para demostrarlo. A pesar de la falta de evidencia científica, muchos dueños de mascotas saben perfectamente que sus animales tienen personalidades únicas y que pueden sentirse aburridos, deprimidos, solitarios e incluso enlutados. Hablemos entonces sobre cómo reconocer la depresión en las mascotas y cómo lidiar con ella.
Los gatos y la depresión relacionada con el estrés
La gente tiende a pensar que los gatos son distantes e independientes, pero éstos también experimentan estrés cuando sus dueños no pasan suficiente tiempo con ellos o cuando se enfrentan con cambios importantes en el ambiente. Se sabe que los felinos adoptan conductas nuevas luego de enfrentar situaciones estresantes, como por ejemplo orinar y defecar fuera de su caja, o se vuelven destructivos. De hecho, cuando los veterinarios examinan gatos cuyo comportamiento no es normal, siempre preguntan al dueño si ha habido cambios importantes que podrían haber estresado al gato hasta el punto de afectarle emocionalmente de manera negativa.
Los gatos también muestran signos de depresión al dormir más de lo habitual, siendo menos activos, escondiéndose, dejando de comer o de acicalarse, siendo agresivos y vagabundeando alrededor de la casa vocalizando más de lo habitual. Saber cómo se comporta normalmente su gato en el día a día le ayudará a identificar qué ocasiones, por muy insignificantes que parezcan, podrían desencadenar una depresión para así tomar las medidas pertinentes
Uno de los primeros pasos para identificar la depresión en las mascotas es aprender a reconocer los síntomas de la depresión en nosotros mismos. Perros y gatos pueden absorber el estado de ánimo de su dueño, así que si usted ha estado deprimido últimamente, puede que su mascota esté reflejando en su comportamiento lo que a usted le está sucediendo, los perros sobretodo son muy empáticos. Pero también es importante resaltar que tanto los perros como los gatos pueden sufrir de depresión debido a algún problema psicológico, así que si usted no puede dar con la razón de porqué su mascota está decaída debería sin duda alguna llevarla al veterinario para que la examine y pueda excluir cualquier causa fisiológica.
Formas de manejar y tratar la depresión
1. Mantenga un ambiente libre de estrés y pase tiempo con su mascota. Intente por todos los medios posibles de proveer a su mascota un ambiente libre de estrés. Si sus hijos tienden a ser inquietos, por ejemplo, asegúrese de que su mascota disponga de un lugar tranquilo al cual retirarse. No olvide proveer a su mascota de una rutina diaria que incluya horarios fijos de alimentación y suficiente tiempo de juegos.
2.Tome en cuenta la opinión de los profesionales.. Los problemas conductuales se tratan con terapia. Sin embargo, algunos casos pueden requerir la ayuda de fármacos. No se alarme si su terapista felino y su veterinario coinciden en que, para tratar el problema de conducta de su gato, es necesario el uso de algún medicamento, incluidos los antidepresivos.
3. Busque ayuda para usted mismo. Las mascotas son especialmente vulnerables a las emociones y los estados mentales de sus dueños. Si la salud mental de su mascota le preocupa deténgase un momento a pensar cuáles han sido sus propios pensamientos y emociones en los últimos tiempos. Si usted encuentra que puede necesitar ayuda para determinar la severidad y complejidad de sus propios sentimientos, considere pedir cita con un especialista para discutir las opciones de tratamiento para usted mismo.